Subiendo a la tenebrosa pirámide del Montgó

Suena el despertador a las 6:30 AM. La temperatura bastante agradable, sí no estuviésemos en Julio, diría qué es primavera, recojo las cosas y marcho en dirección a Denia desde Las Marinas. Por la carretera y a la derecha se ve perfectamente el macizo del Montgó, parece estar siendo fagotizado por un cielo Negro. El parque del Montgó se encuentra entre las poblaciones de Denia y Javea.

Llego con el coche a las faldas de la sierra a eso de las 7:30, cojo el equipo y sin perder más tiempo comienzo a trotar por una pista de tierra y arena, la pista va zigzagueando, por lo qué el ascenso no es muy pronunciado. Después de unos 4 kms. El zigzagueo se termina y la pista continua bordeando el contorno de la sierra.

Comienzo a pensar que toda la ruta (PRV-), va a ser de este tipo, pista forestal alrededor sin subir a la cima, me resigno y me digo a mi mismo, es la primera vez que lo abordo, ya vendrán más. Continuo y cuando alcanzo los 6 kms. El camino, pista empieza a desaparecer y ha convertirse en senda.

Cruzo algo parecido a una rambla y me encuentro con la cova del camell. No hay agua, tampoco me hace falta, no es un día especialmente caluroso. Dejo atrás la cueva y comienzo a ascender, ja!, todo indica que voy a subir a la cima.

Otra vez a zigzaguear, esta vez se hace eterno. Parece como qué estoy a punto de alcanzar la cima, porque la curvatura de la montaña y la niebla hacen qué se pierda la vista y siempre queda lo mismo...una verdadera pirámide. 

Al final alcanzo la cima después de atravesar un collado que la niebla perfila dándole un carácter tétrico. En la cumbre donde encuentro un punto geodésico aprovecho para hidratarme y inmortalizar el momento.

Continuo un rato cresteando, no veo mucho, la niebla lo impide, incluso hace frío y caigo en la cuenta de que no estoy empapado de sudor, es humedad, voy calado desde la cabeza a los pies. A lo lejos, una carrasca parece sacada de las novelas de Stephen King.

Comienza el descenso, paisaje karstico y un 100% de humedad, eso  significa pista de patinaje, hoy me ha tocado la lotería cuando he decidido llevarme los bastones de trekking, me han salvado de aterrizar unas cuantas veces. El descenso no hubiese sido nada complicado sino hubiese sido por la humedad, un pequeño tramo, un tanto técnico hasta volver otra vez con el zigzagueo de la senda. Hacemos un alto en la cova del aigua.

Encontramos la pista que me conduce hasta el coche, un par de kilómetros por la pista de tierra y ya estamos en él.

Han sido 16 Km. en 3 horas y un desnivel acumulado de 800 metros.